La criminología se ocupa de la delincuencia y de su control. Como disciplina científica es una
ciencia empírica, basada en la utilización de métodos e instrumentos reglamentados para la recogida sistemática de información y la validación de las hipótesis y teorías. Los objetivos que se pretenden conseguir son el conocimiento de los mecanismos de prevención y tratamiento de la delincuencia; los modelos de prevención; técnicas de investigación y de tratamiento de la víctima. Los conocimientos superiores en Criminología se configuran en torno al estudio del por qué, cómo, cuándo y bajo qué circunstancias se desarrolla el acto criminal. El mundo del crimen es dinámico y está vinculado al curso de los acontecimientos sociales, culturales, vitales y políticos que viven las sociedades.